Imagina la escena:
Tengo 17 años y es el momento de pensar qué carrera quiero cursar en la Universidad, o si quiero estudiar algún título de formación profesional.
Delante de mí tengo un abanico grande de posibilidades y elijo lo que creo que es más conveniente para mí.
Llego a las clases y no me siento 100% motivada, pero aun así estudio mucho, me esfuerzo y consigo terminarla.
Después hago un curso de postgrado mientras busco trabajo y voy pasando de una sustitución en otra hasta que consigo un contrato indefinido.
Al cabo de los 3 años de estar trabajando me doy cuenta de que he tocado techo, ya no puedo ascender más en lo que se refiere a mi profesión y tal y como está la situación del mercado laboral.
Además resulta que he sido madre y me duele en alma dejar a mi hija durante 8 horas al día con otras personas para que cubran sus necesidades, cuando en realidad desearía ser yo misma su cuidadora.
¿Te suena de algo?
Esto mismo me pasó hace años, y fui dando vueltas hasta que encontré información sobre emprendimiento online y vi la cantidad de posibilidades que se abrían ante mí.
En un principio decidí dedicarme a mi profesión y desarrollar mi emprendimiento desde el mundo de la salud infantil como farmacéutica especialista en pediatría.
Según iba adentrándome en el mundo de la tecnología, las herramientas informáticas y el marketing online, me di cuenta de que me apasionaba, así que decidí dar un giro total a mi carrera y comenzar un nuevo tipo de negocio ayudando a otras madres a poner en marcha sus negocios digitales.
Poco a poco, mis compañeras emprendedoras fueron encargándome trabajos técnicos relacionados con sus emprendimientos:
- programación de redes sociales
- diseño de páginas webs
- diseño de páginas de ventas
- creación de funnels de ventas
- atención a clientes
- etc
y fue así como desarrollé una nueva rama de mi negocio como Asistente Virtual.
Hoy en día esta profesión de nueva creación es una de las que está en mayor auge, ya que cada vez son más los negocios digitales que se abren y más gente necesita de las habilidades de las Asistentes Virtuales.
Comenzar tu propio proyecto como asistente Virtual es relativamente sencillo, pues solo necesitas tener una serie de habilidades como:
- manejar el correo electrónico
- manejar WhatsApp
- saber utilizar un calendario digital tipo Google Calendar
- ser organizada y resolutiva
Simplemente con esto ya puedes comenzar a ofrecer tus servicios. Poco a poco puedes ir aprendiendo a utilizar nuevas herramientas informáticas y adquiriendo nuevas destrezas que te permitirán ampliar tu cartera de servicios.
¿Te gustaría tener tu propio negocio online para poder trabajar desde cualquier lugar y pudiendo atender las necesidades de tus hijes?
¿No tienes claro qué tipo de negocio digital puedes comenzar?
La opción de ser Asistente Virtual es un buen comienzo para establecerte como emprendedora online.
¿Te gustaría poner en marcha tu propio negocio como Asistente Virtual?
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y en tan solo 8 semanas podrás tener en marcha tu propio negocio generando ingresos desde tu casa desarrollando una profesión con gran demanda y proyección de futuro.
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