Tienes un producto o servicio que está demandando tu público pero ¿no sabes qué cobrar por él? ?
Este bloqueo es más frecuente de lo que crees.
El freno se produce principalmente porque:
➡️ Te cuesta valorar tu propio trabajo.
➡️ Estás despistada en cuanto a las tarifas que se suelen cobrar por productos/servicios similares.
➡️Piensas que si pones precios altos perderás clientes.
➡️Todo esto unido a la gente que va pidiendo rebajas cuando les comunicas tus tarifas.
?♀️Quien piense que tus precios son demasiado altos, no es tu cliente y no te va a comprar. No te enfoques en ellas.
?Si pones precios muy baratos puedes dar una impresión equivocada a tu público. Pueden llegar a pensar que de tan barato que es tu producto/servicio su calidad es muy baja. Esto no es lo que tú quieres que perciban.
?Para ajustar un precio piensa en la relación beneficio/calidad que tú ofreces, y calcula a partir de esto.
?♀️Cuanto más personalizado es un producto/servicio, más alto será su precio.
?Por ejemplo: las sesiones personales individuales suponen una inversión más alta que los talleres o cursos grupales. La ayuda que ofreces a tu clienta en una sesión individual es mucho más afinada y enfocada en la solución que necesita.
?Lo mismo sucede si eres artesana y creas productos exclusivos para tus clientas: si son productos confeccionados a mano nunca va a haber dos iguales por mucho que te empeñes. La exclusividad es un valor añadido que aumenta el precio de los productos.
Finalmente:
✅ Observa el mercado y el rango de precios de los negocios que se dedican a lo mismo que tú.
✅Calcula cuánto quieres ganar por hora de trabajo.
✅Ten en cuenta los impuestos que pagarás.
Te mereces ganar dinero por el trabajo que realizas, y te mereces cobrar un precio justo por tu tiempo y tus conocimientos. No lo olvides.
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